No sé si a vosotros os pasa como a mí, pero profundizar en el tema del feng-shui me pone muy nerviosa. No compré mi casa pensando en él y, la verdad, a la hora de amueblarla y decorarla, me fié más de mis instintos que de las normas de esta tradición milenaria.
Así que cada vez que me pongo a leer sobre el tema me doy cuenta de que tengo las orientaciones equivocadas, los colores perjudiciales y las formas menos beneficiosas...
- La puerta de la casa ha de estar siempre mirando al Sur para que la familia pueda ser feliz.
- ¡Haaaala! ¡Y la mía mirando para el norte! ¡Ahora lo entiendo todo!
Por ejemplos como este, decidí hacerme mi propio "mini-listado" para tener en cuenta en el día a día, sobre conceptos que sí son modificables fácilmente o representan hábitos nocivos energéticamente en el hogar:
- Cierra siempre las puertas de los armarios, cajones, muebles de la cocina, etc. Y muy importante: las puertas de los cuartos de baño.
- No compres adornos o figuras con formas picudas, mejor redondeadas.
- Cierra siempre la tapa del WC y si te lo tomas muy en serio, pon tapones en todos los desagües.
- Ten siempre limpio y ordenado (ya no sólo por el feng shui jeje) y es importante no amontonar
cosas encima de los muebles o en las esquinas. Si es posible, todo guardado en muebles y cajones, fuera de la vista.
- Espejos: cuantos menos, mejor (en el baño sí, en el resto hace falta un máster en feng-shui para colocarlos armónicamente)
- Las plantas, siempre fuera si no te comprometes al 100% a darles un cuidado exhaustivo y nunca, nunca, nunca en la entrada.
- Cambia de vez en cuando las cosas de sitio, de adornos, de orintación...
- No acumules ropa para lavar; sobre todo, toallas húmedas.
- Si puedes elegir, elige siempre luz natural. Nada de bajar las persianas a las 18:00h y encender las luces.
- Tira a la basura todo lo viejo o que no uses.
- Intenta usar todos los fogones de tu cocina por igual.
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